Muchos cuando empiezan en el gimnasio, a pesar del ánimo y de la buena disposición se ven con el siguiente problema: el aumento de peso. Si bien para algunos esa es la meta, porque quieren ganar masa muscular, para otros, esto puede representar un problema.
Pero antes que los que se ven en esta situación desistan en sus esfuerzos de lograr un cuerpo más fit y más esbelto, puedes revisar estos puntos para verificar si este aumento de peso no corresponde a algunos de estos puntos, que como todo en el mundo, también tienen solución:
Aumento de músculo: Muchas personas hacen ejercicios con el único fin de ver reducir los números en la balanza. Y cuando ven que estos no ceden, sino que pasa todo lo contrario a pesar de sus mejores esfuerzos, piensan que lo están haciendo todo mal cuando en realidad pueden estar logrando el santo grial de los entrenamientos: el aumento de músculo. Cuando se estimulan los músculos a través del trabajo levantamiento de pesas, se estimula el rompimiento de la fibra muscular, que se repara durante el sueño. Esto es lo que logra que el músculo crezca. Y durante ese proceso, el sujeto puede estar quemando grasa y aumentando en masa muscular, haciendo que la balanza no se mueva o que se mueva pero hacia arriba (si gana mucho músculo). Y a pesar de lo que gente piensa, el músculo no pesa más que la grasa, simplemente ocupa menos espacio. Pero sustituir los espacios de grasa del cuerpo por músculo magro, el aumento de peso puede suceder. También en este proceso de formación de músculo, muchas personas no queman la grasa suficiente para que estos se noten, ya que la formación de músculo y la quema de grasa suceden con dos tipos de alimentación distinta. Para armar músculo se tiene que comer por encima de las calorías que se requieren y en cambio, para quemar grasa, un poco por debajo. Esto hace que muchas personas vean en su cuerpo la formación de músculo pero sin haber quemado la grasa y sienten el aumento de peso.
Comer por compensación: Muchos de los que inician una rutina nueva de ejercicio aumentan de peso por llevar una mala alimentación. Piensan que las calorías quemadas durante una sesión de ejercicio son suficiente para dar rienda suelta a su paladar. Pero no es así. La gente tiende a sobreestimar las calorías que quema en las sesiones de ejercicio y el mismo valor energético de los alimentos. Por ejemplo, una sesión de pesas puede quemar de 100 Por ejemplo, una sesión de pesas puede quemar unas 100 calorías para una persona de 60 kg, en media hora de ejercicio. Por más que el esfuerzo parezca muy alto, la realidad es que la quema de calorías puede ser baja -pero los beneficios de las pesas se ven fuera de la sala de musculación-. Si luego de esta sesión el deportista se come una barra de proteína, que ronda las 180 a las 200 calorías, supera las calorías quemadas. Si bien es necesario que quien practique alguna actividad física ingiera los alimentos adecuados para recuperarse, debe prestar especial atención a lo que come y su valor calórico si su fin es la pérdida de peso.
Inflamación: Otro factor que vemos relacionado con el aumento de peso y el ejercicio es el que proviene de la inflamación. Esto que pasa sobre todo en aquellos que se inician en una rutina de ejercicios, se puede describir como esa sensación de inflamación, la ropa queda más apretada, cierta incomodidad, fuerza disminuida, rigidez y dificultad para completar los ejercicios con rango completo de movimiento. Esto pasa cuando un músculo levanta pesos a los que no está acostumbrado, y se forman esas micro rupturas que habíamos hablado anteriormente, que es parte natural de la construcción de músculos más fuertes. Para reparar estas microrupturas, el cuerpo utiliza su proceso de curación normal donde se incluye la fase de inflamación. Para esta respuesta inflamatoria normal que sucede en el cuerpo, se necesita líquido que se acumula en el músculo y que como cualquier líquido que fluye en nuestro sistema, pesa algunos gramos. Esto es lo que muchas personas ven reflejado como aumento de peso en la balanza, pero no es aumento de grasa. Si a este aumento momentáneo en el peso le suman el dolor producido por el inicio de actividades deportivas, muchas personas abandonan su programa si darle tiempo a que este funcione realmente. Para ver este peso que desaparezca, se debe esperar un tiempo y sobretodo, seguir levantando pesas y haciendo el ejercicio cardiovascular apropiado. Para "apurar" este proceso de cierta manera, el continuar con una alimentación adecuada es fundamental. Beber mucha agua y el incluir ciertos alimentos diuréticos como los pepinos y espárragos, o ácidos grasos omega 3 como los que se encuentran en el salmón puede ser beneficioso para luchar contra la inflamación y este supuesto "aumento de peso".
Exceso de cortisol: El cortisol es una hormona para nuestro cuerpo y es segregada en situaciones de peligro y estrés crónico. Y el ejercicio es un proceso de estrés para el cuerpo. Muchos deportistas encuentran imposible bajar de peso incluso llevando una dieta controlada y un buen programa de ejercicios, por sus altos niveles de cortisol, causados muchas veces por el sobre-entrenamiento. El cortisol promueve la descomposición de las proteínas para su proceso de recuperación, esto va en contra del crecimiento muscular y la pérdida de grasa. Proteínas y aminoácidos son los bloques de construcción de músculo por lo que cualquier cosa que causa una disminución en la disponibilidad ellos en el cuerpo es negativo para las metas del deportista. Las cantidades excesivas de cortisol también pueden disminuir la testosterona y la relación cortisol/testosterona, es uno de los indicadores de la capacidad del cuerpo para recuperarse del estrés producido por el ejercicio. Más cortisol y menos testosterona se traducen en una capacidad debilitada para recuperarse y construir músculo.
En conclusión, el deportista o aficionado que esté buscando una meta específica como la pérdida de peso debe tener en cuenta estos factores para poder alcanzar su meta. Saber que va a construir músculo, debe llevar una dieta adecuada, preparase para las reacciones adversas -pero pasajeras- que pueda sufrir su cuerpo y tener un descanso adecuado para lograr la nivelación de sus hormonas y una completa recuperación.