Con el establecimiento de un solo huso horario universal, ahora tenemos atardeceres más oscuros, algo que no siempre se condice con nuestros tiempos disponibles para correr. Pero para que la noche no se transforme en un impedimento para entrenar, acá te entregaremos ocho consejos para que salgas sin que te asuste la falta de luz.
1) Ruta conocida: si vas a correr de noche, lo mejor es que sigas un ruta que manejes. Así podrás saber qué sitios son más seguros, dónde encontrar eventuales puntos de hidratación o de descanso, y por cierto, cómo volver a tu casa. Además podrás evitar los baches o complicaciones de camino.
2) Identificación: hay ciertos lugares privados o cerrados en donde podrían pedirte algún tipo de identificación (no cualquiera sale a correr a medianoche en vez de estar acostado en su casa viendo la TV). También es útil en caso de accidentes.
3) Contra el tráfico: por mucho que suene que estás violando la ley al correr con el tráfico, no lo es. Tú no eres un medio de transporte como para correr por la calle. Salvo que se trate de un lugar rural donde no exista otro sector por donde hacerlo, corre siempre por la vereda y en contra del tránsito. De ese modo podrás estar atento a cualquier peligro eventual.
4) Usa reflectantes: en línea con el consejo anterior, intenta usar reflectantes al correr. La mayoría de las zapatillas y poleras de running están confeccionados para estas funciones. Si poseed poca ropa reflectante intenta dejarla para tus trotes nocturnos. También puedes adquirir cintas reflectantes para brazos o piernas por precios económicos.
5) Usa luces: si vas a correr por lugares oscuros, parques o cerros es recomendable que utilices algún tipo de linterna frontal. En el mercado hay de varios de tipos, con diversa cantidad de lúmenes que pueden ayudarte a evitar caídas, torceduras u otro tipo de lesiones.
6) Corre acompañado: no siempre se puede, pero a veces tenemos la oportunidad de correr con algún compañero(a). Apróvechalo. Un acompañante puede ayudarte en caso de que surja algún problema en el camino o aconsejarte alguna ruta o darte algún dato sobre algún punto de hidratación u otro.
7) Lleva un teléfono: perderte, lesionarte o sufrir algún percance, nunca sabes lo que puede pasarte, y la noche es más riesgosa claro. No siempre podremos encontrar un taxi o algo para volver a la casa, por lo que es recomendable llevar un teléfono en caso de cualquier problema.
8) Un solo audífono: si eres de los que no puede correr sin música, es mejor que utilices un solo audífono para estés atento a cualquier problema que puedas enfrentar en la ruta. Recuerda que en ese horario suele haber menos tráfico y los autos y ciclistas tienden a andar más rápido.
Recuerda que la noche no es excusa para dejar de entrenar, pero hazlo con cuidado.
Imagen CC Billie Ward.