Como todo en la vida, comenzar a hacer ejercicio cuesta. A todos nos pasa, más aún si uno espera convertirlo en un hábito que lo ayudará a tener una mejor salud y verse bien. Pero existen pasos que puedes seguir a la hora de comenzar una rutina de entrenamiento y lograr motivarse para así hacer del deporte parte de tu día a día.
1.Ponte metas
Según demostró un estudio del Diario de Comportamiento Deportivo, fijarse metas resulta beneficioso a la hora de adherirse a una rutina deportiva. Puedes comenzar con metas simples, como correr una cierta cantidad de kilómetros y luego ir superándote. También, el estudio afirma que las metas tienen que ser de carácter internas, es decir, fijarse logros como el simple hecho de disfrutar el ejercicio o un aumento de la energía en vez del reconocimiento de los demás o cómo uno se ve físicamente.
2. Busca maneras de premiarte
Investigaciones de la Universidad Estatal de Michigan dieron cuenta que el simple hecho de prometerte algún premio al cumplir una cierta cantidad de tiempo haciendo deporte ayuda a seguir realizándolo. Cada un mes, podrías prometerte una comida un poco salida de la dieta o por cada 2 kilos perdidos, comprarte mejor implementación deportiva. Obviamente, los premios no siempre tienen que ser comida.
3. Mezcle deportes, se variado
Variar la actividad física es importante según estudios de la Universidad del Sur de Alabama porque ayuda a no aburrirse y poder mantener el hábito, solo que cambiando la forma en que se hace. Jugar un partido de fútbol, otro de tenis, salir a correr o andar en bicicleta; o incluso incluir deportes menos comunes como el handball.
4. Hacer seguimiento de tu progreso
El hecho de darse cuenta de que se están logrando avances, ya sean notorios en el cuerpo o en la salud, ayudan a que quieras continuar con una vida de ejercicios y motivarse aún más.
Eso lo mostró una investigación hecha por la Universidad del Oeste de Sidney, que además agregó que ayuda a querer aumentar los niveles de actividad física. También es importante darse cuenta de qué tanto se ha aumentado la actividad física desde el comienzo. Así que a contar los kilómetros que se corren, el peso que levanta o los días en que uno se ejercita; ver que se ha logrado un avance de verdad te harán sentir muy bien.
5. Ejercítate en grupo
Hacer ejercicio junto a más gente, además de ser más divertido, es un importante factor a la hora de decidir si mantenerse en un deporte o no. El estudio de la Universidad de Stanford demostró que la actividad física junto a más personas alienta a mantener dichos entrenamientos. Así que recluta gente, porque además de ayudarte a hacer del deporte un hábito, te divertirás más y harás que más personas opten por una vida activa.