Los gimnasios son un lugar que puede ser intimidante para algunos, divertido para otros o simplemente necesarios para otros tantos. Sea como sea, el gimnasio forma parte de las actividades donde la gente socializa con sus amigos de gimnasio, que al final son personas con las que se mantienen ciertos intereses en común.
El gimnasio es también un lugar donde puedes pasar largas horas y además es una inversión cuantiosa por lo que tiene que estar basada en varios factores que van más allá de lo lindo que se vean los equipos o la música de la clase de spinning.
Esta es una lista de cosas que debes tener en cuenta a la hora de escoger un gimnasio:
1) Ubicación: Este punto es fundamental y veo que pocas personas le prestan atención. Es de suma importancia que esté en tu círculo de acción o que te quede al lado de la casa como para ir a primera hora de la mañana, o de regreso del trabajo, y lo puedas usar en cualquiera de esos horarios. Muchas personas se dejan llevar por otros factores: porque el equipo está más nuevo, porque el gimnasio es "más lindo" o está de moda, porque tus amigos van a ese gimnasio o porque tu profesor favorito da clases ahí. Pero si te queda lejos, cuando pase la emoción de las clases que amas (porque pasa), tus amigos no puedan ir, o el gimnasio pierda su "brillo" ¿vas a tener la misma dedicación para ir hasta donde esté ubicado? Pocas personas lo hacen y si lo hacen es por tiempo limitado y una vez que pasa el ímpetu, también desaparecen las ganas de ir al gimnasio.
2) Horario: Fíjate que concuerde con tus necesidades. Yo siempre reviso bien cuáles son los horarios y limitaciones de mi gimnasio. Quizás el paquete que tomaste te ahorra mucho dinero, pero no te deja asistir a las clases que quieres. O quizás a las horas a las que pretendes ir, son las horas tope donde va hasta tu papá. Busca uno que te dé flexibilidad de horarios y en que puedas tomar las clases a las horas que tú quieras y te brinde acceso a las maquinarias cuando más te convenga.
3) Staff: Es importantísimo que tu gimnasio tenga gente autorizada por el establecimiento para darte indicaciones, sobre todo en lo referente al uso de las máquinas, más aun si eres de aquellos que sienten que el gym es un territorio salvaje e inexplorado. Si no los hay, pues deja la vergüenza de lado y pregúntale al encargado o a alguno de los profesores sobre el uso del equipo. Mi recomendación es mantenerte lejos de aquellos que te quieren dar "recomendaciones de gratis" y que muchas veces te quieren "ayudar" sin tener ninguna certificación ni idea de lo que hablan.
4) Ofertas: En estos tiempos, ¡el dinero hay que cuidarlo! Fíjate qué planes tienen y cuales te sirven más. Quizás si te inscribes con un amigo te dan un mes gratis, o tienen horarios "ejecutivos" que se adecuan a tus necesidades y no tienes que pagar por la mensualidad completa. Hay muchos gimnasios que tienen planes para la tercera edad o para estudiantes. Lo que tienes que fijarte es que el plan que agarres no te limite o que esas limitaciones no terminen siendo pérdida de dinero para ti.
5) Fíjate en sus clases: Revisa los horarios de las clases y arma una rutina que vaya de la mano con tus objetivos. Mi recomendación siempre es hacer pesas y luego ejercicio cardiovascular. Y claro, esto va a depender de tus objetivos, y por eso es tan importante que cuando pienses en tu rutina, te asesores con un profesional, o con tu entrenador personal o con el staff del gimnasio para que te dé indicaciones. La idea no es que hagas horas interminables de cardio en las máquinas o media hora de curls de bíceps sin ninguna resistencia porque no sabes qué hacer. Para ver buenos resultados, tienes que planificar y eso también se traduce en dinero bien invertido.
Sea cual sea tu objetivo perder peso, ganar masa muscular, mejorar aeróbicamente, ser más flexible o simplemente no sentir que los años te están pasando por encima como un camión, en el gimnasio puedes lograrlo. Pero la idea es que pongas esa inversión a valer, mientras te pones en forma.
Imagen CC UNE Photos.