Si estás comenzando a disfrutar de los beneficios de usar la bicicleta y después de andar terminas con una serie de dolores en tu cuerpo, es importante que tengas claro, cuál es la postura correcta que debes tener cada vez que te subes a una bicicleta. El conocimiento que tengas sobre este aspecto, puede resultar transcendental al momento de decidir si continúas con la actividad física o desistes porque no puedes aguantar el dolor.
Andar en bicicleta es un excelente ejercicio. Técnicamente, consiste en realizar, una sucesión de movimientos repetitivos con los pies, en torno a una circunferencia que en su totalidad dibuja una vuelta completamente. Eso multiplicado cientos de veces. En palabras simples, tienes que pedalear y hacerlo bien te hará conseguir excelentes resultados.
Como se trata de movimientos repetitivos, es importante lograr una buena postura al momento de realizarlos, ya que ejecutar erróneamente un ejercicio durante un tiempo prolongado puede generar serias lesiones.
Si en más de una oportunidad sientes molestias que distan de ser las propias de realizar esta actividad física, y tampoco son producto de caídas anteriores ni de la práctica de otra actividad física, debes necesariamente hacer una revisión a la postura que utilizas al andar en bicicleta.
Lo primero que debes revisar, es si la talla del cuadro que elegiste es la correcta. Un ejercicio que te puede ayudar en esto es medir la distancia entre tu entrepiernas y el suelo. El resultado multiplícalo por 0.21 y si te da un decimal aproxímalo para obtener la talla en pulgadas.
También debes ajustar el sillín a tus necesidades. Si bien es cierto que tener el sillín bajo te permite tener más control de tu bicicleta, es primordial ajustar la altura correctamente, de lo contrario, darás una carga extra a tus piernas, provocando dolor en las rodillas. Si está muy bajo darás excesiva flexión y si está muy alto podemos generar un exceso de tensión por extender demasiado las rodillas mientras se pedalea. Podemos saber que la altura del sillín es la correcta cuando logramos estirar la pierna, con el pie en el pedal, sin forzar la postura de nuestra cadera.
Otro aspecto importante es la posición del sillín. Lo más recomendable es que el sillín se ubique completamente perpendicular al poste. Una posición correcta te permitirá pedalear correctamente, evitar lesiones lumbares y en el caso de los hombres evitará insensibilidad en el perineo.
Por último debes posicionar de manera recta tus piernas y tu pies. Mientras realizas la circunferencia debes alinear el eje de la cadera, rodilla y tobillo. Debes ser muy cuidadoso con la técnica de pedaleo que utilizas y evitar errores como la inclinación de las rodillas hacia adentro o hacía afuera o inclinar la punta de los pies.
Revisando cada uno de los temas mencionados anteriormente, podrás además evitar dolores en los brazos, en la nuca y en la espalda, obteniendo mayores indices de comodidad al momento de realizar ésta actividad física.
Imagen CC Wolfgang Lonien