No por ser diabético, se está limitado a práctica deportiva. Por eso acá te entregamos 10 consejos para realizar deporte sin riesgos.
1) Mide tu glucemia antes de hacer ejercicio: si es menor de 100 mg/dl toma un suplemento como una fruta o una bebidas energéticas antes de entrenar. El nivel de glucosa debe estar entre 100 mg/dl y 250 mg/dl para realizar ejercicio sin problemas. No sobrepases este máximo ya que al hacer ejercicio los músculos liberan glucosa, lo que puede generarte complicaciones. De todos modos, si has presentado problemas en rangos inferiores, procura no sobrepasarlos. Para esto es bueno llevar un registro escrito de los valores.
2) Valora el nivel de esfuerzo e intensidad de la actividad que vas a realizar. Si realizas una actividad aeróbica durante más de 30 minutos tu nivel de azúcar en sangre irá disminuyendo poco a poco y si realizas una actividad anaeróbica puede que tu nivel de azúcar aumente o esté elevado justo después y durante la actividad.
3) Haz ejercicio como mínimo dos horas después de la última comida para poder medir de forma más precisa la glucemia.
4) Consume previamente hidratos de carbono, ya sea a través de pastillas, en líquido o en barritas.
5) Si te inyectas insulina antes de hacer ejercicio, procura no hacerlo en la zona en la que los músculos se van a ver más implicados. Procura elegir la zona muscular menos activa en el ejercicio que vas a realizar.
6) Controla tu nivel de azúcar en sangre durante el ejercicio.
7) Considera que las hipoglucemias debidas a la práctica de ejercicio físico se pueden producir incluso 48 horas después del desarrollo del mismo. Recuerda esto para ajustar la cantidad de insulina que te inyectres y la cantidad de hidratos de carbono que consumas.
8) Hidrátate bien durante el ejercicio, preferentemente con agua.
9) Reconoce los síntomas de tu cuerpo tanto en el caso de las hipoglucemias (debilidad, vista nublada, sudores fríos, temblores, hambre voraz, entre otros) como en el de las hiperglucemias (sed, ganas de orinar constantes, boca seca…) para poder hacer ejercicio de la manera más segura posible y sin correr riesgos.
Recuerda que la diabetes no es necesariamente un impedimiento ni una excusa para dejar de hacer deporte, ya sea a través del gimnasio u otras actividades aeróbicas o combinadas. Eso sí, procura hacerlo siempre de manera controlada y evitando cualquier riesgo.
Imagen CC Jessica Merz.