Cuando empezamos en la vida fitness a veces queremos hacer mucho de una vez, o no estamos claros en lo que tenemos que hacer, nos aburrimos, ponemos excusas para no hacer nuestra tarea, en síntesis, un sinfín de aspectos que, en vez de acercanos, nos alejan de nuestras metas. Y lo que pasa es que el principio de un nuevo años, nos trae miles de oportunidades por delante. El calor del verano y el apuro por vernos bien, son factores que se suman y en vez de hacer las cosas bien, terminamos equivocándonos con nuestras metas de fitness.
Revisa aquí algunos de los errores típicos de los que se inician en el mundo fitness y sobretodo del ejercicio, y evita que los ánimos y metas que te plantees con tu cuerpo en este 2015, no queden solo en promesas escritas en un papel.
1. Hacer mucho muy rápido: Lamentablemente esta es una de las que se repite una y otra vez, año tras año, con los mismos resultados. La persona que no sale ni a caminar con su perro pero quiere correr 10 Km a final del mes. O en el gimnasio quieren hacer maratones de clases, dos de spinning, una de bodypump, un poco de yoga y zumba, para terminar. Claro, el ánimo y las endorfinas puede que lleven a que termines tu loca jornada pero la realidad es esta: tu cuerpo debe acostumbrarse poco a poco a un nivel progresivo de ejercicio. Si no estás acostumbrado a hacer ni una hora de ejercicio, no vas a poder cumplir con horarios de más de hora media y si por suerte completas tu cometido, esta energía no te durará más allá de la segunda semana. Todo esto te terminará dejando extremadamente adolorido, solo a pasos del sobreentrenamiento y susceptible a lesiones. Y por supuesto, esto se traduce en que dejes tu plan de entrenamiento antes de lo que pensabas.
2. Perder tiempo: Claro que cada día es una nueva oportunidad de ponerte los zapatos y salir a golpear el asfalto. Pero, al igual que darle al botón de snooze en la alarma, tiene que llegar un momento en que debes dejar la mentalidad de "el próximo lunes" y empezar de verdad a ejercitarte si quieres ver cambios. Es duro, pero es mejor despertar y hacerlo. Posponer todo el tiempo el inicio de la actividad deportiva para un "mejor momento" no te llevará más cerca de tus metas porque seguramente ese momento perfecto no llegará nunca. También tiene que ver con el punto de "no tener un plan" que explicaremos más adelante.
3. Aburrimiento: Para los que comienzan la energía es lo que reina a la hora de ejercitarse. Pero es muy importante mantener ese ánimo en alto para poder completar los entrenamientos, y en esto entra tu ingenio, ya que tendrás que ver cómo hacer tu jornada más divertida. Primero, debes escoger alguna actividad que te motive a continuarla. Si tomas la clase de ejercicio que más odias, lo más seguro es que lo abandones. También tienes que valorar el tipo de ejercicio que vas a realizar. Digamos que empiezas a hacer ejercicio en una caminadora en el gimnasio o en una bicicleta estática, y no llevas música, ni hay nada que ver. Los primeros cinco o seis minutos de hacer una actividad que es nueva, te cansarán y te van a parecer como una eternidad. Lo ideal es que si tomas alguna actividad repetitiva, como las anteriores, busques algo que te distraiga como música, algún programa que te guste en la TV si haces ejercicio en tu casa (eso hace que el tiempo pase volando), etc. También debes considerar que si no eres de las personas que pueden pasar 45 minutos haciendo algo repetitivo, quizás es mejor salir a caminar a la calle o tomar una clase grupal donde te mantengas motivado.
4. No tener un plan: Empezar a hacer ejercicios no es sólo decirlo, hay que saber qué se va a hacer. Tanto para los que deciden hacer ejercicio en casa como los que van a un gimnasio es de primordial importancia que tengas claro lo que vas a hacer cada día, qué músculos entrenar, que actividad vas a hacer. Así sea que te decidas por hacer videos en tu casa, clases grupales o hasta una guía impresa que te lleves a la sala de pesas de tu gimnasio. No tener un plan es tan contraproducente como no hacer las compras correctas antes de empezar un plan de alimentación
5. Inconveniencia: ¿A qué me refiero con esto? A tomar una actividad o un gimnasio al que no puedas asistir. Por ejemplo, planificas ir a correr todas las mañanas justo cuando empieza la temporada de lluvias, o justo cuando empiezas un curso que hace que entres más temprano en el trabajo, o te inscribes en un gimnasio que está lejos de tu círculo de acción, esto quiere decir que no quede ni cerca de tu casa ni de tu trabajo y que conlleve un gran trabajo el poder ir a él. Imagínate cruzar la ciudad a las seis de la tarde solo para tomar una clase de zumba en tu gimnasio favorito. Por más que te encanten esas clases, tienes muchas más probabilidades de fracasar que de continuar en las mismas. Lo mejor que puedes hacer es planificar una actividad que puedas hacer (por ejemplo, un video de ejercicio de Youtube de cardio intenso en vez de salir a correr) o una que no signifique un esfuerzo muy duro poder hacer esa actividad (que tu gimnasio quede al lado de tu casa o de tu oficina y no tardes más de 15 a 20 minutos, o menos, en acceder al mismo, por ejemplo).
Así que si vas a empezar tu plan de fitness, toma en cuenta esta lista y limpia los errores. Es la mejor manera de empezar para llegar a tu meta.
Imagen CC Dangerously Fit.