Este arte marcial coreano, creado en 1955, ha ido sumando adeptos cada vez más rápido. Incluso, es una disciplina tan importante, que está presente en los Juegos Olímpicos.
A pesar de que estar dividida en dos autoridades deportivas; la WTF (World Taekwondo Federation) y la ITF (International Taekwondo Federation), en ambas se practica el Taekwondo de la misma forma. Fundamentalmente basado en dos pilares: deporte sano y filosofía.
Este lado filosófico (basado en las ideas de Confucio y Lao Tsé), tanto a mí como a todos los que entrenan esta área, ha sido de gran utilidad para enfrentar la vida de tal manera, que podremos superar cualquier meta.
En mi vida he superado 10 metas gracias al Taekwondo. Algunas, bajo sus 5 pilares principales; y otras, simplemente viviendo esta bella experiencia deportiva.
Bajo los 5 pilares fundamentales
Cortesía
Al igual que muchas personas, siempre he deseado un mundo mejor, y me propuse vivir una vida en pos de aquello. Pero suena una tarea enorme, casi imposible de cumplir.
Sin embargo, las prácticas del Taekwondo me enseñaron que la base de toda intención filantrópica es la cortesía.
Gestos tan pequeños, como el saludo antes de un combate; el respeto a las normas durante éste; y el reconocimiento del oponente al final de la competencia, me inculcaron que en la vida diaria gestos tan simples de amabilidad, pueden convertir el mundo en un lugar mejor.
Integridad
Siempre he sido un mal líder en cualquier proyecto que se necesite, y cuando se me asignaba esa tarea, terminaba siendo "el malo" del grupo de trabajo.
No obstante, durante las prácticas de este deporte, uno debe aplicar la honradez y congruencia. Como por ejemplo el admitir errores, felicitar logros ajenos, seguir las reglas, etc. En definitiva, me generó una actitud de rectitud. Es así como al volver a ser el líder de un trabajo, comencé a actuar con la misma rectitud, que fue reconocida por mis compañeros y esto les generó mayor confianza en mí.
Perseverancia
Cada practicante debe partir desde cero, y para seguir avanzando en las etapas de aprendizaje (cambiar de cinturón) debe superar algunas pruebas.
No existe una clave para avanzar de cinturón. Simplemente, debes practicar constantemente para lograr las metas requeridas, y debido a que se necesita mucha habilidad y concentración; la perseverancia es clave.
De esta forma, me acostumbré a vivir luchando incansablemente por las cosas que deseo en la vida, y en momentos donde no resultan las cosas, alejo la frustración y me levanto de nuevo para seguir luchando, tal como en medio de un combate de Taekwondo.
Autocontrol
Todos hemos estado en situaciones donde algo o alguien nos saca de nuestras casillas, y terminamos haciendo cosas inapropiadas.
El Taekwondo me enseñó a mantener la compostura, simplemente por medio del combate.
Suena contradictorio, pero para ganar una competencia de este de porte, no hay que "volverse loco pegando patadas". Quien logra ganar, es quien domina mejor su cuerpo para aplicar con moderación las técnicas aprendidas.
Espíritu indomable
Este pilar significa que al enfrentar un problema complicado, debes hacerlo utilizando valentía y sin renunciar a tus principios.
Lo cual pude aplicarlo en momentos de exámenes en la universidad. Pueden ser demasiado complejos (sobre todo si estudias y trabajas), pero siempre los enfrenté sin quejas y sin hacer trampa alguna. Por supuesto este es un ejemplo simple, que ha ocurrido en mi vida. Pero es muy útil en casos complejos, como enfermedad, problemas laborales u otras situaciones.
En mi escuela de Taekwondo
Amistad
A pesar de que aprendemos técnicas de pelea. Siempre terminamos siendo todos amigos, respetándonos mutuamente.
De tal manera, logré ampliar mi circulo de amistad. Ya que muchas veces incluso discrepando opiniones y credos con otras personas, pude crear grandes amistades bajo la tolerancia.
Salud
Este punto es fundamental.
El Taekwondo me generó una rutina deportiva, convirtiendo una costumbre el practicar cualquier tipo de actividad física.
Con el tiempo los resultados fueron notables: no tan sólo mi cuerpo se tornó más ágil, sino que también mi mente; haciendo que mi desempeño en diferentes áreas de mi vida sea el óptimo.
Familia
Los torneos de Taekwondo son hermosas instancias donde se conocen personas de todos los lugares y todas las edades. Es por eso que mi vida familiar fue cada vez más agradable, incluso, cada vez más miembros de mi familia comenzaron a practicar la disciplina conmigo. De esta forma creamos lazos más fuertes y lindas experiencias.
Evitar la procrastinación
Mucho tiempo solía dejar todas las cosas para "después", siendo que en realidad terminaba no haciéndolas.
El Taekwondo me enseñó a crear metodologías y ser una persona de orden, lo cual conlleva a auto-gestionar el tiempo para concretar tareas; y por sobre todo, con ánimo.
Esto se lo agradezco a mi maestro, ya que siempre recalcó que ser disciplinado es un punto clave.
Serenidad
En este mundo tan atareado, lleno de obligaciones y mucha presión, todos somos propensos a caer en el estrés; e incluso en cuestiones más complejas como la depresión.
Este deporte se puede practicar en cualquier momento, y no es necesario tener un contrincante. Simplemente, cuando sentía que lo necesitaba (estando bajo mucha presión), me tomaba un break para ir al parque más cercano y simplemente practicar los movimientos físicos y prácticas mentales de este bello deporte.
Recomiendo el Taekwondo a cualquier persona que desee cambiar su forma de vida no tan sólo superficialmente, sino que también espiritualmente.
He logrado cambios impresionantes en mi salud física y mental; y mi personalidad ha adquirido cada vez más características positivas.
¡anímate! ¡y saca ese espíritu indomable que llevas por dentro!