El ejercicio vigoroso, como correr, calienta el cuerpo. Cuando la temperatura corporal se eleva, el sistema nervioso le indica a las glándulas sudoríparas que secreten agua en la superficie de la piel, donde enfría el cuerpo a través de la evaporación (termorregulación) junto con el agua, se pierden metales, minerales, lactato y urea. En promedio, la composición del sudor es así:
Sodio: 0,9grs. por litro
Potasio: 0,2 grs. por litro
Calcio: 0,015 g/l
Magnesio: 0,0013 g/l.
El cuerpo masculino en promedio, contiene alrededor de 75.000 mg de sodio, el equivalente a 11 cucharaditas de sal, o, para darle su nombre químico, cloruro de sodio (NaCl). Si durante el entrenamiento pierdes 1 kg de sudor por hora, la pérdida de sodio se vuelve significativa. Y ejercitarse con calor es peor aún.
El sudor también se da debido a estrés, por lo que muchos deportistas hacen ejercicios de relajación antes de competir.
¿Por qué es importante el sodio?
El sodio juega un importante papel en el funcionamiento de músculos y nervios, ya que funciona como un electrolito, lo que quiere decir que transmite diminutos impulsos eléctricos nerviosos, cumpliendo un rol clave en las contracciones musculares. El sodio también ayuda a mantener la cantidad adecuada de agua dentro y fuera de las células y en la sangre.
Riesgos para los corredores
La pérdida de sodio durante el ejercicio son altamente variables y dependen de una gran cantidad de factores, entre las que se incluyen temperatura del aire, duración del ejercicio e intensidad, y estado de hidratación. Los niveles bajos de sodio pueden causar deshidratación, calambres musculares e incluso falla de los órganos.
La hiponatremia (baja de sodio en la sangre) ocurre cuando una ingesta excesiva de agua diluye el sodio fuera de las células, mucha agua se filtra en las células y se hinchan, incluidas las células del cerebro. Los síntomas fluctúan progresivamente entre sentirse débil, atontado, asqueado e incoherente hasta tener tropiezos, ataques, llegar al coma, e incluso la muerte.
Los principales signos de perdida excesiva de sodio son los siguientes:
-Sudor salado, que llega a arder los ojos
-Manchas de sal en la ropa
- Calambres musculares frecuentes
- Problemas de deshidratación
El nutricionista Tom Hollis recomienda poner mucha atención a la nutrición de un deportista, especialmente si presenta estos síntomas. Si un atleta suda mucho, puede ingerir una combinación de comidas saladas y bebidas ricas en electrolitos para mantener los niveles de sodio normales. Afirma también que los carbohidratos ocupan un rol cada vez más importante a medida que los ejercicios de resistencia aumentan, y fuentes magras de proteínas pueden ayudar a prevenir la degradación muscular.
Vía: Runninfitnessmag