Hay personas que aunque saben que el deporte es bueno, deciden evitarlo por problemas de salud. Las personas con hipertensión son algunas de ellas. Lo bueno es que quienes poseen esta enfermedad también pueden practicar actividades físicas, bajo prescripción médica ¿cuáles puedes hacer?
El ejercicio aeróbico, aquel en que predomina la frecuencia por la sobre la intensidad es ideal para pacientes hipertensos. Acá encontramos actividades como running, ciclismo, natación o baile.
Por otro lado, el entrenamiento de fuerza, necesario si se quiere practicar actividades aeróbicas de forma permanente para evitar lesiones, es posible incluirlo dentro de las rutinas de pacientes hipertensos, siempre cuando actúe como un complemento. En estos pacientes, el ejercicio de fuerza debe incluir ejercicios poliarticulares, de resistencia a la fuerza y que impliquen grupos musculares grandes.
Un paciente hipertenso, en ningún caso, debe considerar trabajar con ejercicios isométricos o de estabilización ya que estos pueden incrementar la presión abdominal.
Otro aspecto importante, es que la intensidad del ejercicio de un hipertenso debe ser predominantemente moderada, de modo tal que oscile entre el 55%y el 70% de la frecuencia cardíaca máxima (FCM) o entre el 40% y el 60% del VO2 máximo.
Los mayores resultados del entrenamiento de un hipertenso, se obtienen con intervalos de entrenamiento que van entre los 30 y los 60 min continuados, entrenando mínimo tres y máximo cinco días a la semana.
Recuerda que la intensidad, el tipo y la duración del ejercicio varían persona a persona de acuerdo al grado de hipertensión de cada paciente, por lo que si padeces esta enfermedad (o conoces a alguien que la tenga y quiera practicar deporte), consulta a tu médico cómo seguir un rutina acorde con tu salud.
Imagen CC jarmoluk.