Una persona promedio, que se está iniciando en el running, puede llegar a terminar los 10 km en un tiempo que puede variar entre los 50 y los 60 minutos después de algunas semanas o meses de entrenamiento. Bajar los 40 minutos es una tarea compleja que requiere entrenamiento intenso y que no cualquiera puede conseguir. Pero eso no fue impedimento para que la entrenadora de Nike, Julia Webbs, bajara ese tiempo y de paso batiera el récord de 10 km empujando un coche.
Quería intentarlo con su propia hija de dos años, pero su peso era excesivo para la alcanzar la meta, es por eso que Julia Webbs recurrió a una pareja amiga para solicitarles correr con su bebé de siete meses en coche, en la competencia Run Like Hell 10K (Corre como si estuvieras en el infierno 10 km).
Con su tiempo de 38:15 segundos logró bajar en casi cinco minutos el récord anterior de la canadiense Allison Tai de 43:07.
“El mayor impedimento estaba en el carrito porque muchas competencias los prohiben y, en aquellas que los permiten, no estaban dadas las condiciones necesarias para poder desplegar la velocidad deseada”, explicó Julia Webb, quien aseguró la presión del inflado de las ruedas del carrito resultó decisiva para poder bajar el récord debido a que de ese modo mejoró diez segundos por cada kilómetro.
Imagen vía RunTeamWebb