Recuerdo perfectamente la primera vez que vi a conciencia una partido de tenis. Estaba de visita en la casa de mis abuelos en Traiguén, un pueblo ubicado cerca de Temuco. Toda la familia estaba reunida entorno a la televisión y todos observaban concentrados y sin conversar mucho, salvo comentarios referentes al partido. Yo tenía ocho años y la verdad es que de tenis no sabía mucho, en ese tiempo era visto como un deporte de élites, algo que no podíamos practicar los niños al salir a jugar a la calle.
Seguí el juego por un segundos y después de un rato, le pregunté a mi papá por la regla principal: esa que divide el terreno de la cancha entre un partido de individuales y un dobles. Con eso en mente, me pareció mucho más fácil y me interesé más. Ese partido era nada menos que del Chino Ríos. Es ese deportista que fue avanzando impresionantemente en su ránking ATP, que veíamos jugar casi todas las semanas, muy temprano en la mañana o incluso muy tarde en la noche, por las diferencias horarias, que podías ver en todos televisores de todos los lugares públicos a los que asistieras, es ese el tenista que nos hizo ver el tenis como un deporte atractivo y al éxito como una meta alcanzable.
Él fue quién con su número del mundo en el ránking ATP, alcanzado el 29 de marzo de 1998 frente a Andrea Agassi, nos dijo a todos por primera vez, que un chileno podía ser el mejor del mundo en un deporte. Con ese logro, el "Chino" Ríos inspiró no sólo a otra camada de grandes tenistas como Fernando González y Nicolás Massú, sino que abrieron el tenis y el deporte a muchos niños y jóvenes como una actividad sana, como un sueño que algunos podían alcanzar.
El distinguido como "Mejor Deportista Chileno del Siglo XX" por la entonces Digeder, consiguió 18 títulos ATP, pero ningún Gran Slam. Su lesión a la espalda lo obligó al retiro del tenis profesional a los 27 años, en el torneo de Roland Garros el 2013.
Aunque haya abandonado este deporte siendo muy joven, su tenis siempre será recordado como uno de muy alto nivel con ángulos impresionantes, colocaciones perfectas y una especial habilidad para crear cambios de velocidad con su inigualable muñeca izquierda.
Actualmente, Marcelo Ríos se encuentra apoyando la labor de Nicolás Massú como Capitán de Copa Davis, eso sí con un estilo de vida más relajado debido a los problemas que causaron sus intensos dolores de cabeza durante este año y que lo llevaron incluso a estar internado. Además se encuentra desarrollando charlas inspiracionales y clínicas de tenis e impulsando actos públicos para incentivar la práctica de este deporte en el país, demostrando que ahora sí "está ahí".
Primera Charla de Marcelo Ríos:
Imagen: http://marcelorios.cl