La naranja es el clásico alimento con vitamina C, el que todos recomiendan y quizás el favorito por su sabor que mezcla ácido y dulce. La vitamina C sirve para fortalecer el sistema inmunológico, mantener los huesos sanos y fuertes, evitar las enfermedades cardiovasculares y degenerativas, absorber el hierro proveniente de los alimentos que se consumen, combatir los radicales libres y retrasar el envejecimiento prematuro y natural. Estos puntos hacen que su consumo sea importante, pero además de esta existen otras frutas que tienen más cantidad de esta importante vitamina. Aunque no todas sean conocidas o estén siempre a tu alcance, es bueno tener algún tipo de variable de sabor. Claro que no es la idea comerse muchas de esta frutas, si no que ahora tendrás una opción más rápida para consumir mucha vitamina C.
Guayaba
Contiene casi 5 veces más de vitamina C que la naranja por cada 100g y, con ello, se multiplican sus beneficios. Además, esta deliciosa fruta es antiséptica, antihelmíntica y astringente, por lo que ayuda a remover del organismo las bacterias y los virus.
Frutillas
Estas pequeñas frutas de color rojo tienen casi el mismo contenido de vitamina C de la naranja por cada 100g. Además, posee vitamina A y del complejo B, como así también minerales esenciales para el organismo como el potasio y el magnesio.
Piña
Es una gran aliada de nuestra salud porque contiene vitamina A, C, E, K y del grupo B. Asimismo, incluye una gran cantidad de fibra, agua y minerales como el calcio y el hierro que ayudan a mantener a nuestros huesos sanos y fuertes. Es diurética y depurativa, por lo que es perfecta para quienes deseen eliminar las toxinas del organismo y perder peso.
Camu-camu
Para el chileno, quizás la fruta más exótica de todas. Pero el camu-camu, que crece en Brasil, Venezuela, Colombia y Perú; puede llegar a aportar hasta 40 veces más de vitamina C que la naranja. Además de poseer propiedades antivirales y, con ellas, combatir los resfriados, brinda una gran cantidad de energía y antioxidantes que combaten el envejecimiento, fortalecen el sistema inmunológico y previene enfermedades degenerativas como el Parkinson y Alzheimer.