Si hay algo de lo que se habla cuando se piensa en fisicoculturismo es en esteroides. Inyecciones, químicos, hormonas y otras sustancias ilícitas. Si bien son el día a día de muchos de los que practican esta disciplina, para otra gran cantidad, no es algo que siquiera les pase por la mente. Pero quienes no tengan conocimiento de esta disciplina y el esfuerzo que conlleva, muchas veces piensa que estas sustancias son la única manera de lograr ganancias y los físicos que se ven en estos atletas, lo que no es necesariamente cierto ni seguro.
Los esteroides anabólicos son definidos en Drugabuse.gov como "substancias sintéticas relacionadas a las hormonas sexuales masculinas que promueven el crecimiento del músculo esquelético (efectos anabólicos) y el desarrollo de características sexuales masculinas (efectos androgénicos) tanto en hombres como en mujeres". Fueron desarrollados alrededor de 1930 para tratar problemas con el desarrollo insuficiente de los testículos masculinos y durante las investigaciones se descubrió que facilitaban el crecimiento del aparato muscular de los ratones de laboratorio. Este descubrimiento fue lo que llevó a ser usado por fisicoculturistas y otros atletas. A medida que el deporte se consolidaba como tal y se esperaba más de los atletas, el uso de esteroides de hizo más común.
Y es que la naturaleza competitiva del fisicoculturismo -como en otros deportes- ha estado de la mano con el uso de esteroides. Durante la década de los 40 la testosterona sintética estaba al alcance de todos y en los 50, el esteroide Dianabol conquistó el mercado y hasta los 60, además de estar al alcance de todos, era 100% legal usarlos en las competencias. Hacia 1968, con la llegada de Arnold Schwarzenegger a la escena del culturismo y lo que se conoció como "la era dorada del bodybuilding", el uso de esteroides fue más serio y evidente. Los atletas los usaban libremente y era normal verlos en los gimnasios. Hacia la década de los 80, empezó a cuestionarse su uso, especialmente la hormona de crecimiento y la insulina. En varios países prohibieron su uso, pero esto nunca ha impedido que se siga utilizando en las salas de pesas. Actualmente las asociaciones de culturismo se encuentran divididas entre los culrutistas que apoyan el uso de sustancias de manera regulada y los culturistas 100% naturales.
Muchos atletas que siguen usando esteroides se sustentan en que su buen uso es totalmente seguro. Pero la mala fama de estos productos está muchas veces basada en sus efectos secundarios, que pueden causar notable daño a la salud. Quienes los defienden dicen que estos efectos secundarios son causados por las altas dosis utilizadas por los atletas.
Según Mayoclinc.org, el uso indiscriminado de esteroides puede causar diferentes problemas tanto en hombres como mujeres:
En los hombres se pueden observar efectos adversos como:
-Pechos prominentes
-Calvicie
-Testículos encogidos
-Esterilidad
-Impotencia
En las mujeres, también se pueden observar efectos secundarios indeseados como:
-Voz más profunda
-Clítoris agrandado
-Aumento de vello corporal
-Calvicie
-Períodos infrecuentes o ausentes
Y tanto los hombres como en mujeres, el uso de esteroides puede causar acné severo, aumento del riesgo de tendinitis y rotura de tendón, anormalidades del hígado y tumores, aumento de las lipoproteínas de baja densidad (LDL colesterol "malo") y disminución del bueno (HDL), presión arterial alta, problemas cardíacos y circulatorios, comportamientos agresivos, trastornos psiquiátricos, como la depresión, infecciones o enfermedades como el VIH o la hepatitis -por el uso de inyecciones contaminadas-, problemas del crecimiento y el riesgo de futuros problemas de salud en los adolescentes
La verdad es que la estética y la fuerza no valen poner en riesgo la salud de ningún atleta. Se pueden conseguir grandes logros a través del esfuerzo, la dieta adecuada y hasta el descanso. La mejor ayuda que la persona puede buscar es encontrar la motivación correcta para alcanzar sus metas.
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