La frecuencia cardiaca es un indicador que muchos corredores están empezando a utilizar para realizar sus entrenamientos. Saber a qué ritmo correr, cuánto exigirse y cómo diferenciar los ritmos según cada objetivo se ha vuelto un número determinante para muchos de ellos, aunque no todos recuerdan medirlo.
Hasta ahora, la forma tradicional de hacerlo es utilizando un reloj y una banda cardiaca, ambos conectados entre sí. El problema es que no todos se acuerdan de llevar consigo esta útlima. De ahí que medirla se haya vuelto un objetivo esquivo para algunos.
En la actualidad, existen otras formas de medirla, pero suelen ser más complejas o incómodas, de ahí que las empresas hayan optado en los últimos años por desarrollar tecnologías para mejorar esta medición.
Garmin presentó el 225, el primer modelo de su línea de corredores que mide la frecuencia cardiaca en la muñeca ¿cómo lo hace?
Para medir la frecuencia cardiaca desde la muñeca, el Forerunner 225 utiliza un sensor óptico incorporado que brilla en la piel del usuario y mide la cantidad de luz que regresa. Debido a que hay cambios leves mientras la sangre fluye a través de la muñeca, el sensor utiliza un proceso de filtrado avanzado para determinar la frecuencia cardiaca de manera confiable y precisa. Además, un sello de luz en la parte posterior del reloj bloquea la luz ambiental para ayudar a garantizar la detección de la frecuencia cardíaca adecuada.
Este modelo incluye además una zona gráfica con cinco zonas de entrenamiento.
También posee dos pantallas de entrega de información entre las que se incluyen datos como tiempo, lap time, distancia, lap distance, pasos, cantidad de pasos promedio, lap race, velocidad, cadencia, calorías, frecuencia cardiaca actual, frecuencia cardiaca promedio, zona de frecuencia cardiaca y altura.
Este dispositivo proporciona una actualización automática de los entrenamientos a Garmin Connect, la comunidad gratuita de la empresa que le ofrece a sus usuarios almacenar, planificar y compartir sus actividades en redes sociales, además de realizar seguimiento en vivo de las mismas.
El Garmin Forerunner 225, pesa 54 gramos, 13 g más que su antecesor el Forerunner 220, aunque menos que otros modelos como el FR920XT (62 g) o el Fenix2 (86 g).
Su batería tiene una duración que varía entre las siete y las 10 horas con uso de GPS y monitor cardiaco, y de cuatro semanas como reloj.
El modelo estará disponible en negro/rojo a partir de junio por USD$299.
Imágenes vía Dcrainmaker/Facebook.