Mi experiencia en: Insanity

Yo siempre practiqué mi rutina de fitness en mi casa. Mi lema siempre ha sido que puedes estar en forma desde la comodidad de tu hogar. En un principio esto era debido a que de verdad no tenía el dinero para ir al gimnasio (los que me quedaban cerca de la casa eran muy costosos) y luego, cuando ya digamos que tenía el presupuesto más holgado, no tenía el tiempo. Porque ir al gimnasio requería tiempo, no sólo para hacer ejercicio, sino para ir, venir, etc.

Por eso, desde que "instalé" mi gimnasio en la casa, que básicamente eran unos discos de pesas, mancuernas ajustables y una bicicleta estática, empecé a buscar rutinas que me distrajeran y por supuesto, rindieran resultados. Cuando ya llevas años sentada en una bicicleta estática viendo la teleserie, te das cuenta que debes ponerle un poco más de sabor a tu día de ejercicios.

Así fue como investigando mucho, llegue a beachbody.com y sus videos y programas de entrenamiento. Habían para todos los gustos y colores, y la verdad fue que empecé con P90X porque me gustaba el cuento de la resistencia y la musculación. Ahí había un video que se llama PyloX que básicamente es media hora de ejercicios polimétricos que te dejaban con la lengua afuera. En un principio te pueden parecer "saltos sin sentido" pero cuando terminabas la rutina, te quedabas pensando "esto es too much".

Ya enganchada con la sudadera extrema empecé la búsqueda de algo que fuese más fuerte... Y así fue como llegue a Insanity. Estos ejercicios, que son un conjunto de movimientos que implican alta velocidad de repeticiones, ejercicios con el peso corporal y ejercicios aeróbicos, los hacía un atractivo moreno que te gritaba durante los 40 min de duración del video, mientras que los que hacían los ejercicios (en un salón parecido a una cancha de básquet techada) le seguían el paso, o simplemente abandonaban y lloraban desconsolados. Yo me dije "esto es lo que tengo que hacer".

Empecé por el video más simple y sentí que me quitaban el alma. Entendí porque Shawn T gritaba todo el tiempo "check your heart beat" (Checa tu ritmo cardiaco) y "take a break" (Toma una pausa, cosa que siempre hacia). No obstante a todo el sufrimiento, le dije a mi esposo "hazlo conmigo" y tan lindo él, me hizo caso. Sudábamos a mares en la sala de la casa y nos decíamos que nunca nos llamarían para participar en ese video, éramos los últimos de la clase por decir lo menos.

Pero el entrenamiento de alta intensidad te engancha. Te deja jadeando pero siempre vas a querer más. Las endorfinas te suben a 10mil y si en un principio sólo le deseas mal a Shawn y a su equipo, terminas agarrándoles un cariño que debe ser un poco masoquista. Además, en dos meses, perdimos por lo menos una talla de ropa cada uno.

Pero la diversión tuvo sus consecuencias: este ejercicio no es para rodillas débiles. Por los años de (mal) entrenamiento que tuve en mi juventud, mis rodillas siempre me dolían, y el alto -altísimo- impacto de Insanity fue la gota que rebaso el vaso. Mi rodilla derecha dijo un día no más. En el traumatólogo me dijeron que tenía Condromalacia Patelar grado 1, que si bien es la más leve, dolía como para dejar esa rodilla quieta. El tratamiento: ningún ejercicio de alto impacto, nada de brincos y arabescos. Adiós a Insanity.

La verdad fue que disfruté (y sufrí) mucho en esos dos meses. Y si, se los recomiendo a las personas, si y sólo sí están en su peso correcto (El exceso de peso y los ejercicios alto impacto son terribles para las articulaciones y espalda), si tienen zapatos correctos para hacerlo (la amortiguación es importante) y tienen el ánimo de hierro. Porque cuando escuchas a Shawn diciéndote por enésima vez “Dig deeper!” y sigues haciendo el ejercicio, es porque de verdad, así sea en el fondo, te gusta un poco el sufrimiento.